Intercambiar un correo con Lules Echevarría es entrar en un mundo de GIFs y emojis. Eso sí, con propósito. En su caso, el de romper la barrera escrita y transmitir su entusiasmo y la autenticidad de su carácter y, precisamente, es justo ahí donde vemos que reside el core de su profesionalidad: buscar la esencia de las marcas con las que trabaja, entenderlas y compartir ese conocimiento esencial para que la marca sea ella misma en todo momento. En este Nal3Talks, Lules nos descubre cómo el branding va más allá de un logo o una tipografía, algo que para algunas personas puede resultar más complicado de comprender. Además, cuando se trata de una empresa, la marca debe ser independiente a las personas que forman la compañía. «Con el branding establecemos unas reglas del juego con las que todos podamos jugar la misma partida. En muchas empresas, (…) la marca va cambiando según la persona que lo recibe porque no hay unas reglas comunes de juego».
Establecer estas reglas no es fácil. El trabajo de Lules, supone poner en crisis a los clientes, hacer que se replanteen cosas y entrar en el juego de la subjetividad a la hora de obtener feedback. Sobre esto último, en Nal3 siempre hablamos de una frase muy manida y temida, el famoso, «darle una vuelta» como comodín para expresar disconformidad con el resultado sin saber exactamente qué debemos cambiar. A veces puede resultar confuso e, incluso, frustrante, pero Lules, con su capacidad resolutiva, reenfoca la frase. «El concepto de dar una vuelta tiene que estar explicado con un para qué —qué necesitas cambiar—. Cuando más definido esté el briefing más definida estará la respuesta».
Al fin y al cabo, el poder del branding es concretar lo abstracto. Es poder añadir valor a la marca y dotarla de herramientas para expresarse como es y como quiere ser percibida.
Branding en el sector industrial
Sin duda, los componentes creativos y de originalidad aportan un plus en cuanto al recuerdo de las marcas, pero la coherencia y la consistencia son las verdaderas bases de un branding bien establecido, que pueda transmitirse por diferentes canales e impliquen el reconocimiento de la marca.
Esto es extensible a todo tipo de sectores. Incluso aquellos más «fríos» porque el branding también tiene sentido en las compañías industriales: «un proceso de branding bien gestionado aporta luz, perspectiva y seguridad al equipo y a los partners«.
No hay excusas oara no apostar por el branding dentro de tu estrategia de comunicación, pero si antes quieres enterarte de todo lo que tiene que compartir Lules con nosotros, no te pierdas este Nal3Talks.