Enric Vinaixa es el ejemplo de profesional reconvertido: ingeniero de formación, pero gestor de talento de vocación, lleva más de 10 años en el área de Recursos Humanos de SONY. Observar su currículum es contemplar una mutación progresiva de facilitador de soluciones hasta ser un buscador y coordinador de perfiles capaces de responder a las necesidades de un gigante tecnológico a nivel internacional. Sin embargo, en este Nal3Talks no hablamos de pasado con Enric, nos centramos en el presente y “sin ser muy de predicciones” nos ofrece discretos pronósticos en lo que se relacionan profesionales, habilidades e innovaciones tecnológicas como la inteligencia artificial.
Confiar en la tecnología y en las empresas, todo un dilema
El entusiasmo domina la conversación cuando tocamos el tema del poder transformador de la multiculturalidad en los equipos de trabajo. Trabajar entre países diferentes es todo un reto y no es una tarea sencilla. Todo se mide en cuestión de matices y el conflicto es una realidad, no obstante, Enric lo tiene claro «entender los diversos entornos culturales acelera la capacidad de que todos los talentos en su entorno propio sumen y no resten». Tener agilidad para aprender, una mentalidad abierta y la capacidad de crear entornos inclusivos son factores comunes en aquellos profesionales internacionales con el potencial para crecer individualmente desde el ámbito de la diversidad cultural.
La verdad es que media hora de conversación con Enric nos supo a muy poco, pero tuvimos la suerte de tratar temas muy variados como la innovación digital y la cultura corporativa. La mayor clave que nos regaló respecto a la digitalización es que la disposición —una vez más, la mentalidad abierta— hacia las nuevas herramientas pesa más que estar realmente preparado, ya que normalmente existe una gran incertidumbre ante disrupciones como, por ejemplo, la aparición de ChatGPT. Respecto a los comentarios de Enric sobre la cultura corporativa, no pudimos evitar acordarnos de los Nal3Talks de Mireia Rigol o Inés Echevarría, ya que todos destacan lo mismo: la importancia de la coherencia de las empresas entre discurso y acciones para ganarse la confianza de sus colaboradores internos y externos.