La optimización web es tarea obligatoria cuando queremos que los visitantes de nuestra página web se conviertan en potenciales clientes de nuestra empresa. Los formularios de contacto son elementales dentro de esta optimización.
A la mayoría de las personas no les gusta rellenar formularios de registro o contacto. Pedirle a alguien información personal es, con frecuencia, algo que se evita hacer si no es absolutamente necesario.
¿Cuál es la idea? Hacerlo lo menos molesto posible.
Es por eso que me he tomado algún tiempo para hablar sobre cómo mejorar los formularios de tu web para conseguir más clientes.
Cuando hacemos una optimización web, en general, tendemos a fijar la atención en lo que parece más obvio y dejamos pasar detalles… los formularios de registro son un ‘detalle’ que se olvida con frecuencia. Lo curioso es que, esta menudencia (lo digo en tono sarcástico), es justo el lugar en el que tus visitantes se convierten en leads… el momento de la verdad. Así que, por favor: ¡no los subestimes!
En fin, comparto estos consejos que te ayudarán a optimizar tus formularios web para incrementar la tasa de conversión:
Optimización de la ubicación de tus formularios web
El formulario debería estar ubicado en la parte superior de tu página web. Para ser más claros, los visitantes no deberían hacer demasiado “scroll” o tener que desplazarse hacia abajo para poder mirarlo. Debe quedar claro qué es lo que deben hacer los usuarios a continuación y cuál es la oferta que promueves.
Algunos estudios han comprobado que el lugar en donde más conversiones generan los formularios es arriba a la derecha de la página, pues es el primer lugar que la gente suele ver al ingresar a una web.
Finalmente, debes tomar en cuenta todo aquello que rodea el formulario. Dale un poco de espacio; mientras más sencillo, mejor. Es una buena idea utilizar señales para resaltarlo, incluir elementos que refuercen la confianza y los beneficios que el visitante obtendrá si completa el formulario.
La idea es superar lo que los marketeros llaman el “blink test”, esto es, el tiempo que los visitantes tardan desde que ingresan a una web, la juzgan y deciden si continuarán navegando en ella o se irán, es decir: 6 segundos.
Minimiza los elementos que desagraden, como colores incómodos, desorden, distracciones y otros call-to-action que debiliten el objetivo principal: generar más conversiones.
El call-to-action (CTA) o llamado a la acción en la optimización web
El botón para enviar el formulario es mucho más que solo un botón. Es justo esa última oportunidad, ese momento definitivo en el que debes convencer a tus visitantes de que rellenen esos últimos campos.
Alienta a tus visitantes a tomar la decisión final y completar el formulario con un call-to-action poderoso.
Tanto el diseño como el contenido importan. Algunos expertos recomiendan evitar CTA’s predeterminados como: “Enviar” o “Suscribirse”, aunque ciertos estudios han comprobado que los más efectivos son: “Haz click aquí”, “Ir”, “Descarga” y “Regístrate”.
Simplemente, intenta probando diferentes formas hasta encontrar la que mejor funcione para tu sitio web.
Describe concretamente lo que el usuario quiere y obtendrá si hace click. El consejo es: personaliza el botón de “Suscribirte” con la oferta que propones: “Descarga este ebook”, “Apúntame a una prueba”, “Reclama tu cupón”, “Consigue tu asiento”.
A la gente le gusta tener el control. Nadie enviará un formulario si no sabe exactamente lo que ocurrirá después.
El botón y el CTA son una buena manera de dejar claro al visitante para qué está enviando esa información. En la optimización web debes poner mucha atención en los llamados a la acción.
No tengas miedo de hacer un botón grande y muy llamativo, incluso del mismo ancho de los campos a completar. Puedes utilizar colores como el naranja, verde, azul u otro que contraste. Si agregas pequeñas animaciones al botón o cambios de color cuando se toca, será más atractivo aún. No es el momento de ser tímidos, es el momento de hacerte notar.
La optimización web y el número de campos ideal de los formularios
La regla de oro de los formularios es: hazlo lo más corto posible si quieres conseguir más conversiones. Si lo haces demasiado largo, es probable que disuadas a las personas de completar tanta información. Aunque es cuestión de criterio y prioridades: algunos marketeros creen que un formulario muy pequeño puede disminuir la percepción del valor de la oferta. Particularmente, mi consejo es: mantenlo tan corto y simple como puedas.
Corto no quiere decir que debas prescindir de datos que necesitas. La idea es que evalúes qué es indispensable y de qué puedes pasar.
La extensión del formulario depende de algunas cosas:
– En qué nivel del ciclo de compra se encuentra lo que estás ofreciendo: por ejemplo, si estás ofreciendo una infografía o una lista de recursos, no necesitarás más que email. En cambio, si la oferta es algo más valioso, como un ebook, puede ser que las personas estén buscando alguna información mucho más especializada y quizá (solo quizá) requieras un poco más de información.
– Cuántos leads generas: si tu equipo de ventas tiene demasiados leads que filtrar, ir uno por uno es complicado; si agregas más campos al formulario será más fácil cualificar cada prospecto y reconocer a cuáles vale la pena llamar y a cuáles no.
Cada campo que exiges rellenar, incrementa la fricción con el visitante. En algunos casos, únicamente será necesario solicitar el email: no te sientas mal por hacerlo, de este modo, un correo electrónico es un activo IMPORTANTÍSIMO.
En un estudio se tomó un formulario que contenía 11 campos y fue reducido a solamente 4. Los resultados fueron: un 160% más de formularios enviados y un incremento del 120% en las conversiones mientras la calidad de los registros se mantuvo intacta.
La recomendación es mantener los formularios con 3 o 5 campos como máximo.
Los cambios que apliques en una optimización web, dependerán siempre de los objetivos que quieras alcanzar, ¿más leads o mejores leads?
Identifica claramente los campos obligatorios
Si te preocupa que tu formulario aún sigue estando muy largo, puedes especificar a tus visitantes qué información es necesario que completen y cuál no lo es tanto.
Los campos “obligatorios” son comúnmente identificados con un asterisco (*). Los campos opcionales no tienen esta marca. Por lo tanto, asegúrate de que en tus formularios indiques con claridad esta información.
Piénsalo de esta manera: cada campo adicional que agregas hará que pierdas un prospecto. Entonces: ¿esa información adicional que estás obteniendo vale la pena tanto como para perder alguna cantidad de leads?, ¿perderás algo si no obtienes esa información?
Lo ideal es que elimines todos aquellos campos que no sean absolutamente necesarios. Si puedes incluso evitar agregar esta diferenciación entre campos obligatorios y opcionales, mucho mejor.
Un estudio de registro visual indicó que la mayoría de las personas no ven el texto bajo los formularios que dice «campos obligatorios», por consiguiente, creen que deben rellenar todo el formulario. La compañía Expedia logró incrementar sus beneficios a 12 $ millones al año, eliminando del formulario el campo de “Nombre de la empresa”.
¿Qué harás con la información de nombre y apellido de tus leads? Si la necesitas solo para mencionarlos en los envíos de email masivos, olvídalo; La verdadera personalización de la comunicación con los clientes funciona cuando el contenido también es personalizado. Todos saben que el “Hola (Nombre y apellido)” en los newsletters es autorrellenado por un software. Hace algunos años esto dejó de funcionar.
Incluir el número de teléfono como campo en un formulario puede producir una caída del 5% en la tasa de conversión. A menos que tu negocio esté basado en la llamada inmediata después de enviar el formulario, evita este campo, por lo que más quieras: a la mayoría de las personas no les gusta recibir llamadas con fines comerciales.
Como ves, la optimización web y de tus formularios ha de ir alineada con las necesidades de tu negocio y los objetivos que desees alcanzar y, a veces, pequeños cambios pueden generar grandes diferencias.
Evita los botones de “borrar campos”
Nadie que rellene un formulario va a querer borrar todos los campos y si no quieren completarlo, simplemente no lo harán y se irán.
Si un visitante completa tu formulario y accidentalmente hace click en el botón “borrar campos”, la posibilidad de que vuelva a rellenar la información es muy pequeña; por lo tanto, no des lugar a errores. La idea es persuadirlos de enviarte esa información y no de que no lo hagan.
Evita los captchas
Los captchas son esas cajitas anti-spam que suelen agregarse al final de los formularios para comprobar que se trata de un humano el que está ejecutando el registro.
Un estudio realizado hace un año encontró que los formularios que utilizan captchas pueden generar una caída del 3,2% en la tasa de conversión. Otros estudios han verificado que cerca del 30% de los captchas son rellenados equivocadamente por las personas pues, en muchos casos, no son fáciles de reconocer.
Para evitar correr riesgos, asegúrate de que la verificación solo se muestre cuando existan señales de abuso (por ejemplo, que se hayan hecho demasiados envíos del formulario desde la misma dirección IP). En cualquier caso, existen diversas alternativas para evitar el spam, menos molestas para los visitantes que los captchas.
Estos son nada más que unas pocas recomendaciones que, sin duda, te ayudarán a incrementar las conversiones en tu web. En el siguiente post encontrarás más consejos para mejorar tus formularios de contacto y conseguir más clientes:
Sí, quiero mejorar mis formularios de contacto
