Autor: Oriol Conesa
Si en las pasadas semanas cada uno de nosotros no ha recibido un mínimo de 25 felicitaciones navideñas digitales, algo ha fallado. Aunque antes se utilizaran tarjetas que se mandaban por carta y ahora lo más habitual sean las ecards estáticas o en movimiento, la manera más extendida para transmitir los mejores deseos a los demás han sido siempre las imágenes. Con mayor o menor acierto en el diseño (¿alguien sabe por qué aún no se han prohibido ciertas tipografías?), parece asumido que las pocas palabras que se usan en Navidad son siempre las mismas y que todo el protagonismo deberá entrar por los ojos.
Quizás haya que buscar los motivos en que, años ha, un pionero del visual content impuso sus tesis y, desde entonces, su triunfo apabullante entre las agencias de comunicación ha dejado poco espacio a los que prefieren “soltar el rollo”. Hay quien todavía escribe largos mensajes con sus pensamientos, e incluso quien se atreve a desgranarlos en un vídeo, pero más de un destinatario no le dedicará el tiempo suficiente para procesar tanta “profundidad” e, inexorablemente, esas misivas acabarán en la carpeta de “lo leo luego” (por cierto, ¿alguien se lo lee?).
Independientemente de la avalancha de contenidos digitales relacionados con la Navidad (confieso que a mí sí me gusta recibir felicitaciones en estas fechas, incluso la del banco), las virtudes del visual content son innegables (¿razón del auge de Instagram frente a Facebook y Twitter?). El contenido escrito tiene su razón de ser, sobre todo para mejorar el SEO, pero la verdad es que cuando se trata de crear engagement entre el público y potenciar la conversión, se necesita del marketing visual. Algunas estadísticas lo certifican y nos pueden ayudar a incorporar el visual content en nuestra estrategia de marketing:
– El 54% de los usuarios de internet han colgado una foto o vídeo original creado por ellos mismos. Y casi la mitad de los usuarios de internet ha compartido una foto o vídeo de la red.
– El 52% de los profesionales del marketing consideran que el vídeo es importante para generar ventas y el 36% afirma que es fundamental.
Crear vídeos eficaces no es tarea fácil y requiere asumir ciertos costes de edición y producción. Si aún no estás preparado, puedes empezar con infografías, memes, fotografías creativas y otros tipos de visual content que, sin duda, serán útiles para generar leads e incrementar tus ventas.
Moraleja: pon visual content en tu vida, la Navidad te lo recuerda. Fin de año ha sido siempre época para pensar, hacer un ejercicio de introspección y volver a los valores más cabales. Pues pensemos e incluyamos el visual content entre nuestros propósitos para el nuevo año. Sin duda alguna, con las postales de Navidad ya dimos el paso hace tiempo. Desde Nal3 te damos el empujoncito.